Este jueves Mons. Montero continuó su visita pastoral en pueblos alejados de la Parroquia de San Ramón Nonato; al ser las 9:30 am celebró la Eucaristía en Santa Lucía, en esta misa se contó con la Primera Comunión; posteriormente, se desplazó hasta la comunidad de Zaragoza en donde celebró la Eucaristía y compartió el almuerzo con los presentes.
La Eucaristía que estaba planeada para las 2:00 pm en la comunidad de El Brujo fue suspendida debido a las constantes lluvias de estos días que provocaron crecidas en dos quebradas lo que imposibilitó el tránsito para llegar hasta ésta población, una de las más lejanas del centro parroquial.
Finalmente, a las 5:00 pm celebró la misa en la comunidad de San Juan, ahí en el marco de la Primera Comunión, durante la homilía señaló que la Eucaristía es “el mayor acto de amor de Jesús que nos dice coma mi cuerpo para que tengan vida eterna, acto maravilloso de amor, pan de vida eterna”. Predicó que este pan de vida “es la vida que comunica Jesús, que solo de Él la podemos recibir”.
Con vehemencia señaló que debemos acercarnos deseosos a este alimento, pues “no dijo, allá cuando tengas ganas o cuando quieran, Jesús dijo: coman y beban todos de Él; y el segundo mandamiento es yo les dejo un nuevo mandamiento, que se amen los unos a otros como yo les he amado. Amar es indispensable para la Salvación, por eso Jesús nos alimenta para que podamos practicar el mandamiento del Amor, necesitamos la fuerza de Dios para poner en práctica el gran mandamiento del Amor”, preciso.
“Es preciso tener buenos cimientos como la Eucaristía, para saber que construimos la vida de fe sobre roca, capaces de soportar los vientos de las tentaciones, y por eso para estar fuertes hay que tomar y comer su Cuerpo. Que Dios nos ayude a construir sobre roca firme y no en arena movediza”, recordó.
Mañana viernes, terminará esta Visita Pastoral con el desayuno, en donde compartirá con el Consejo de Evangelización Parroquial y posteriormente atenderá a los fieles en consejería espiritual en la oficina parroquial.