Los Hermanos Franciscanos de Cristo Obrero, congregación masculina de derecho diocesano que tiene presencia en nuestra tierra, ha celebrado este 4 de octubre solemnemente a su santo patrono.
En esta ocasión, los Hermanos Franciscanos de Cristo Obrero realizaron tres Eucaristías, la primera de ellas en la Posada Emaús, lugar donde se vive ese espíritu de servicio humilde al necesitado, la misa fue presidida por el padre Fray Andrés Ortíz; la segunda en la Casa de Formación ubicada en La Pintada de San Vito, ahí el Pbro. Fray Marlon Villalta Orozco presidió la misa que contó con presencia de un grupo de laicos y frailes formadores, la tercera misa fue celebrada en la Casa San Damián ubicada en Pérez Zeledón y presidida por el padre Fray Rafa Vega, actual párroco de San Pedro.
Durante la misa celebrada en la Casa San Damián, el Padre Fray José María Arguedas Méndez, conocido con cariño como el Padre Chemita, recordó que un día como hoy hace 66 años recibió su hábito franciscano; el Padre Fray Rafa Vega, nos comentó la petición que hizo Chemita durante la celebración “con mucho gusto, cuando Dios disponga, pido que pueda llevar el hábito franciscano el día de mi muerte”.
Indicó el padre Fray Rafa, que celebrar este día del santo patrono es una ocasión para que “nos alegramos también por todo esta experiencia que Dios ha llenado de bendiciones, nuestra experiencia franciscana de Cristo Obrero; y que Dios bendiga tanta oración de hermanos que han valorado la figura de un gran santo en la historia de la Iglesia, como lo es San Francisco”, puntualizó.
Finalmente, se “resalta la humildad, pobreza y vivencia de un espíritu, de aquel que fue signo de las llagas de Jesucristo, llagas que hoy son tan necesarias en una vida y una acción pastoral; como dice el Plan de Evangelización, llamados a llevar la imagen de Jesucristo que es Buen Pastor. Que todos estos sentimientos nos motiven a vivir este día en honor a san Francisco”, indicó el fraile y sacerdote Vega.