Dentro de la celebración de la Octava de Pascua, se llevó a cabo la Pascua Juvenil Diocesana en nuestra Diócesis de San Isidro, los días viernes 6, sábado 7 y domingo 8 de abril, bajo el lema “Renueva tu sí” a la luz de la cita bíblica de Lucas «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios» (Lc 1, 30). La actividad tuvo como objetivo general llevar a los jóvenes a un encuentro personal con Cristo vivo, que los impulse a transmitir la Buena Nueva en los distintos espacios vitales, animados por el sí de María.
La Pascua se desarrolló en cuatro bloques en donde se intentó tener un acercamiento a la realidad de cada joven, que reconozca sus experiencias de vida y las interprete a la luz de la Palabra dentro del designio amoroso de Dios. Con temas, reflexiones y dinámicas se intentó que cada joven mire su historia y el paso de Dios por ella y cómo su historia personal se convierte en historia de salvación al igual que el Pueblo de Israel.
En un espacio en presencia de Jesús Sacramentado, los jóvenes tuvieron la oportunidad de reflexionar en su relación con Dios para que, de frente a sus problemas y dificultades comprendan que Él nunca los abandona. Por la noche se tuvo ágape después de la cena en donde los jóvenes recogieron las experiencias del día y pudieron compartirlas en una amiente caluroso y fraterno, señaló el Diác. Johnny Leiva, delegado episcopal.
A la actividad asistieron 55 jóvenes de 16 de nuestras parroquias en las que hay presencia de Pastoral Juvenil. El domingo 8 de abril, se culminó la actividad con la Eucaristía presidida por Mons. Guillermo Loría Garita. En la homilía Monseñor Loría hizo hincapié en la urgencia de que cada joven renueve su compromiso cristiano, los motivó a seguir adelante dando testimonio con su fe y por medio de gestos muy simbólicos, los jóvenes profesaron su fe y al final de la Eucaristía se les hizo un envío entregándole a cada uno un pequeño crucifijo, signo del amor redentor de Cristo que nos renueva la fe con la Pascua y nos capacita para testimoniar con nuestra vida que él vive resucitado en su Iglesia joven.