En el tercer día de visita pastoral a la parroquia Nuestra Señora de la Asunción de Sabalito, al ser las 04:00 pm se llevó a cabo el encuentro con los agentes de evangelización del Sector Centro, conformado por las comunidades de San Ramón, Valle Hermoso, Pueblo Nuevo, La Unión, Santa Teresa, Brasilia, San Marcos, Santa Rosa, San Bosco, San Antonio y Sabalito Centro.
El padre José Israel al inicio de la actividad recordó que esta visita pastoral es un acontecimiento histórico en la parroquia especialmente porque es la visita de su pastor y se tiene la posibilidad en primer lugar de conocerle más profundamente y en segundo lugar dar a conocer la parroquia como tal. La idea de los encuentros de evangelización ha sido sobretodo dar a conocer cómo van las pastorales, el ritmo de las comunidades en cuanto a los retos y desafíos que definitivamente se siguen marcando en la parroquia. “Se mantiene la esperanza que esta visita pastoral de frutos abundantes y que todos juntos construyamos el itinerario de parroquia”, concluyó.
Monseñor Gabriel Enrique Montero, inició su participación con una pequeña experiencia de oración mediante la proclamación y reflexión del Salmo 23, el cual permite adentrarse en un clima de oración y también pedir al Señor su asistencia. Este salmo habla del Buen Pastor y esta es una visita pastoral de modo que Jesús Buen Pastor es quien debe brindarnos su asistencia y a él debemos volver su mirada. Este salmo nos deja una gran enseñanza, principalmente que “Jesús es nuestro Pastor y siendo él nuestro pastor, nada nos faltará, incluso cuando estemos viviendo momentos difíciles”, mencionó.
En resumen, se obtiene que: las comunidades que conforman este sector enfrentan problemas de drogadicción, alcoholismo, delincuencia, desintegración familiar, migración de los habitantes hacia otros lugares del país e incluso hacia los Estados Unidos. En algunas filiales existe poca participación de fieles en la Eucaristía, en la Hora Santa y demás actividades de la Iglesia. Sin embargo en otras el número de fieles que asisten a las actividades religiosas es muy bueno, en algunas incluso se ha notado un incremento considerable en comparación con meses anteriores.
En todas ellas se celebra la eucaristía de acuerdo a la programación realizada por el párroco, en casi todas se realiza la Hora Santa semanal, en las que no se celebra misa dominical se lleva a cabo la Liturgia de la Palabra, en algunos lugares se cuenta con oración de Renovación Carismática, Cenáculo del Rosario, entre otros. En la gran mayoría de las comunidades se da catequesis a los niños y se cuenta con el número de catequistas proporcional al número de niños que asisten a los encuentros catequéticos.
En todas las comunidades existen habitantes que practican otros credos religiosos, sin embargo la relación entre vecinos es muy buena, se mantiene un espíritu de amistad y de respeto mutuo, siendo éste un punto a tomar en cuenta. “El cristiano no debe estar en pleitos con sus vecinos, eso no es posible, de lo contrario el accionar evangelizador no sería el mejor. Me parece muy bien que en sus comunidades todos mantengan el respeto mutuo y la amistad con los demás”, agregó monseñor.
Una vez concluida la presentación de cada una de las filiales, Mons. Montero agradeció la información suministrada por los agentes y les comentó que es la única forma en la que puede tener idea de cómo se mueven las comunidades, cómo se organizan y cómo celebran su fe. “Esta ha sido una experiencia en la que he descubierto la problemática que viven las personas que habitan en zonas fronterizas, situaciones que hasta el momento no había imaginado. En lo expuesto por cada uno de ustedes he podido ver que hay comunidades muy bien organizadas y muy dinámicas, sin embargo existen otras que no andan muy bien, pero es momento de trabajar en formar o capacitar personas para diferentes ministerios, para llevar a cabo el plan de evangelización, para acercar a quienes por una u otra razón se han alejado de la vida de iglesia”, manifestó.
Además, hizo un llamado a fomentar más en las comunidades la Hora Santa, pero sobretodo a trabajar más en la Adoración Eucarística, a no sentirse satisfechos sólo con la Hora Santa, sino estar dispuestos a dedicar más horas a la Adoración a Jesús Sacramentado. Recordando que la oración en comunidad es sumamente importante. “En una comunidad se camina si se ora constantemente, entre más adoración haya más esperanza habrá entre sus habitantes, se logrará un mayor crecimiento y desarrollo”, indicó. Para concluir, agradeció a los agentes de evangelización el trabajo, esfuerzo y sacrificios brindados a lo largo de años de servicio, “siempre hay mucho por lograr y mucho en qué mejorar, es momento de seguir adelante y que el año próximo traiga frutos abundantes para todos”.
A las seis de la tarde se celebró la Santa Eucaristía, donde también fueron enviados dos nuevos delegados, uno para la comunidad de San Bosco y la otra para la comunidad de Pueblo Nuevo. Terminada la Eucaristía, tuvo lugar en el salón parroquial, un compartir con miembros del Movimiento Presentacionista con el que se cuenta en la parroquia, el cual es una experiencia laical del carisma de vida religiosa de las hermanas Presentacionistas que desde la década de los 90’ sirven en esta región.